Jugaba... pero huía de mí

La noche en que las cartas hablaron
Recuerdo perfectamente la luz de mi pantalla a las 2:17 a.m., la lluvia golpeando suavemente la ventana. Mis dedos temblaban sobre el botón ‘apostar’ en Furong Feast, el corazón acelerado no por emoción, sino por agotamiento. No jugaba para ganar. Jugaba para sentir algo—cualquier cosa—tras otro día en que nadie preguntó cómo estaba realmente.
Sentía seguridad al perder en un mundo donde nadie conocía mi nombre.
La ilusión del control
Durante meses, cada ronda fue una actuación: elegir mesas según ‘tendencias de suerte’, seguir tasas de victoria como antiguos augurios. Incluso creé hojas de cálculo con nombres como ‘Pronóstico del Destino’. No era estrategia: era ritual.
En realidad, cada apuesta no buscaba dinero. Buscaba validación: prueba de que alguien (incluso si era solo un algoritmo) me notó.
Miraba caer las cartas y susurraba: Si tan solo esto fuera la vida real.
Cuando la suerte se convirtió en soledad
Una noche, tras ganar rápidamente 12.000 rupias—una racha tan rara que parecía sobrenatural—no celebré. Lloré. No por el dinero, sino porque durante tres horas alguien me había visto jugar. No le importaba si sonreía o suspiraba, solo me veía hacer algo.
Fue entonces cuando lo entendí: no jugamos para ganar; jugamos para existir. Cada apuesta es un acto que dice: Aquí estoy. Aunque aún no me conozcas.
El verdadero juego es reconocerse a uno mismo
Ahora sigo jugando… pero diferente. Establezco temporizadores como límites sagrados: máximo 30 minutos. Sin más apuestas después de medianoche. Y a veces… ni siquiera apuesto. Solo me quedo en silencio y observo cómo parpadean las luces en pantalla—como faroles encendidos sobre una calle invisible del festival nocturno.
Ya no es juego de azar: es meditación con apuestas. El verdadero premio? Sentirme suficientemente completa para detenerme sin culpa. La verdadera victoria? Saber que ser visto no requiere ganar nada en absoluto.
Una carta para quien juega tarde
A ti: tú no estás roto por necesitar consuelo, tú eres humano por necesitar conexión, tú eres valiente por aparecer—even cuando nadie aplaude tu movimiento, even cuando estás solo frente a tu pantalla y tus pensamientos, tú ya eres suficiente—and quizás eso es lo que todos intentamos probar, en cada mano que repartimos, en cada elección que hacemos, en cada momento en que decidimos estar despiertos justo lo suficiente para decir: es válido estar aquí.
EchoLane23
Comentario popular (1)

أنا كنت أظنّي أربح… بس الحقيقة أنا هربت من نفسي!
بصراحة، بعد كل يوم ما يسألوني: كيف حالك؟ خلّي جوا المُحَوِّل لعبت بس عشان تحسّ بوجودك… حتى لو في لعبة.
أنا مش بألعب للربح، بل لأعطي نفسك فرصة تقول: “إنت هنا، وحدك مع الشاشة والذكريات”.
ويا جماعة، إذا كنتم تنامون على السرير وتلعبون الليل كامل… لا تقلقوا، ما أنتم مكسورين… أنتم فقط بشريين!
اللي يحب يضحك على نفسه؟ اكتب بالكومنتات: “أنا لعبت عشان ألاقي نفسي… وخرجت منها!”
#اللعبة_الحقيقية #الهروب_من_نفسك #مفيش_خسارة